Comentarios/Críticas:
Orfeo y Eurídice es una obra que trasciende la mera representación teatral, ofreciendo una experiencia profunda y conmovedora que no es para todos, pero que indudablemente vale la pena. Con actuaciones sólidas y un elenco que brilla en cada escena, la dirección de la obra es precisa y consciente, creando una atmósfera que transporta al espectador al corazón del relato. La escenografía y utilería, cuidadosamente diseñadas, sumergen al público en un mundo donde la vida y la muerte se entrelazan de manera inquietante y hermosa.El vestuario, que oscila entre lo simbólico y lo concreto, complementa perfectamente la narrativa, permitiendo que lo que sucede en escena nos atraviese y nos deje reflexionando sobre la fragilidad de la vida. Esta obra nos invita a reconsiderar nuestro día a día y a valorar esos momentos que, aunque parezcan triviales, en el futuro anhelaremos recuperar si se nos da la oportunidad. Es un llamado a la conexión, a expresar nuestros sentimientos a aquellos que amamos, pues no hay garantía de que mañana podamos hacerlo.La emotividad de la puesta en escena es palpable; se siente en el alma y en el corazón. Cuando una obra logra generar tales emociones, es señal de que ha cumplido su propósito: un guion bien escrito, actuaciones más que creíbles y una dirección que pone el corazón y el alma en cada instante. Orfeo y Eurídice es un testimonio de la calidad del teatro contemporáneo y de la importancia de cuestionar temas tan fundamentales como el derecho a la muerte digna en el contexto de los avances médicos.